Croquetas de queso y mostaza

Cuando hablamos de recetas de croquetas seguro que a mas de uno se le hace la boca agua, pues siempre solemos recordar el sabor de nuestras preferidas. En esta ocasión vamos a salirnos un poco de lo habitual, y vamos a preparar unas ricas croquetas de queso y mostaza, una buena opción para servir en un aperitivo familiar o como entrante de la comida del día.

Si quieres otras alternativas bastante originales, te recomiendo que eches un vistazo a las croquetas de langostinos que publiqué la semana pasada, las croquetas de morcilla que tan sabrosas resultan, o las croquetas de lentejas que son perfectas para sorprender a todos los comensales.

Información de la receta

• Raciones: 4 personas
• Calorías por ración (kcal): 266
• Tiempo de preparación: 20 minutos
• Tiempo de refrigeración: 2 horas
• Tiempo de cocinado: 20 minutos
• Tiempo total: 2 horas y 40 minutos
• Tipo de cocina: internacional
• Categoría: aperitivo

Ingredientes necesarios

• 500 ml de leche
• 3 porciones de quesitos
• 70 gr de harina de trigo
• 50 gr de mantequilla
• 1 huevo
• 25 gr de mostaza
• Pan rallado
• Aceite para freír
• Sal

Cómo hacer unas croquetas de queso y mostaza

Lo primero que vamos a hacer es calentar en un cazo la mantequilla para que se vaya derritiendo. Cuando ya esté completamente líquida, añadimos la harina removiendo al mismo tiempo enérgicamente para que todo se mezcle bien.

Seguidamente añadimos justo la mitad de la leche y comenzamos a batir rápidamente con la ayuda de unas varillas, intentado deshacer los posibles grumos que puedan formarse. Luego añadimos los quesitos y la mostaza sin parar de remover.

A medida que vamos removiendo, veremos que se va formando un tipo de crema que cada vez se irá haciendo mas espesa. Es entonces cuando agregamos el resto de la leche. Sin dejar de remover lo tenemos que tener cocinando durante 15 minutos aproximadamente.

Después retiramos el cazo del fuego y verteremos la masa en una fuente, cubrimos con papel film y la meteremos en el frigorífico para que se enfríe cuanto antes. Yo suelo dejarla enfriando toda la noche, aunque en realidad con un par de horas ya nos bastaría.

A la hora de hacer las croquetas, sacamos la fuente del frigorífico, vamos cogiendo porciones de masa y formando las croquetas. En este punto las puedes hacer de la forma que tu quieras, alargadas o redondas, yo en esta ocasión las he preferido redonditas.

Ponemos a calentar abundante aceite en una sartén y cuando el aceite ya esté bien caliente, pasamos las croquetas por el huevo previamente batido, luego por pan rallado y las freímos en la sartén, girándolas de vez en cuando para que se hagan bien por todos los lados.

A medida que vayan quedando doraditas, las retiramos y las ponemos sobre papel de cocina absorbente para retirar el exceso de aceite. Cuando ya las tengamos todas, solo queda servirlas a la mesa acompañadas de la salsa que más te guste. A disfrutar!!

Resumen fácil de la receta

1. Derretir la mantequilla, agregar harina y mezcla bien.
2. Incorporar la leche poco a poco, batiendo para evitar grumos.
3. Añadir los quesitos y la mostaza, y cocinar hasta obtener una crema espesa.
4. Verter la mezcla en un recipiente, cubrir con film y refrigerar al menos un par de horas.
5. Formar las croquetas con la masa.
6. Pasar las croquetas por huevo batido y pan rallado.
7. Freír las croquetas en aceite caliente hasta que estén doradas.