Macarrones con carne picada y queso gratinado

Los macarrones con carne picada son una forma rápida y fácil de cocinar pasta, además de un plato bastante económico. En apenas media hora, podemos tener listos unos deliciosos macarrones con queso fundido, siendo para mí, una de las mejores recetas de pasta que podamos encontrar, o por lo menos, una de las que más se utiliza.

En esta ocasión, voy a preparar este plato con pasta de coditos, pero la puedes cambiar por espaguetis, tallarines o la que más te guste. Lo que te aseguro, es que utilizando cualquier tipo de pasta, este plato gustará a todos los comensales, que seguro terminarán rebañando el plato con el pan.

Información de la receta

• Raciones: 4 personas
• Calorías por ración (kcal): 320
• Tiempo de preparación: 5 minutos
• Tiempo de cocinado: 25 minutos
• Tiempo total: 30 minutos
• Tipo de cocina: italiana
• Categoría: pasta

Ingredientes de los macarrones con carne picada y queso gratinado

• ½ kg de carne picada mixta de cerdo y ternera
• 250 gr de macarrones
• 450 gr de tomate frito
• 30 gr de cebolla picadita
• 180 gr de queso mozzarella rallado
• 1 ajo picadito
• ½ cucharadita de orégano
• Pimienta molida
• Aceite de oliva
• Sal

Para hacer el tomate frito o salsa de tomate, te recomiendo hacerlo en casa siguiendo los pasos de esta receta: Cómo hacer un buen tomate frito casero.

Cómo preparar macarrones con carne picada y queso gratinado

Vamos a comenzar calentando abundante agua en una cazuela y cuando arranque a hervir, echamos la sal y la pasta, la removemos un poco y la cocinamos durante el tiempo que indique el fabricante en el paquete. Se puede utilizar el tipo de pasta que más nos guste, yo en esta ocasión voy a utilizar coditos.

Cuando estén listos, apartamos la cazuela del fuego y los escurrimos en el fregadero y luego los reservamos. Ahora ponemos a calentar una sartén a fuego medio-alto con 2 cucharadas de aceite de oliva y cuando alcance temperatura, echamos la cebolla bien picadita junto con el ajo troceado.

Cocinamos durante unos minutos hasta que veamos que la cebolla empieza a ponerse con un tono transparente y algo doradita, entonces agregamos la carne picada y la condimentamos con la sal, la pimienta negra molida y el orégano.

Seguimos removiendo continuamente para que la carne se haga bien por todos los lados y a su vez, con el tenedor vamos pinchando para evitar que se compacte y así conseguir trocitos pequeñitos. Aunque estemos utilizando carne mixta de cerdo y ternera, el tipo de carne es a gusto de cada uno.

Cuando veamos que la carne ha cambiado de color, ya la tendremos lista, A continuación agregamos el tomate frito o salsa de tomate, mezclamos bien y lo cocinamos durante 2 minutos para que se combinen todos los sabores.

Ahora que ya tenemos la carne con la salsa de tomate, apagamos el fuego y retiramos la sartén. Devolvemos los coditos bien escurridos a la cazuela y también vertemos la salsa de tomate y la carne que acabamos de preparar, revolvemos hasta que la pasta y la salsa se integren muy bien.

Una vez que los tengamos listos volcamos todos los macarrones dentro de una fuente apta para el horno y espolvoreamos por encima el queso. Yo estoy utilizando mozarella, pero si queréis podéis sustituirlo por un queso que os guste y qué funda bien.

Cuando tengamos los macarrones cubiertos con el queso, llevamos la fuente al horno que tenemos que tener precalentado a 180 grados con calor arriba y abajo y con el grill activados si disponemos de él. La colocamos a media altura y horneamos hasta que el queso se funda. Si queréis que se ponga doradito, dejarlo un poco más de tiempo.

Una vez que esté a nuestro gusto, lo sacamos del horno y lo servimos rápido para que no se enfríen. Lo mejor de estos macarrones es que son súper fáciles de preparar, además es una receta que se puede incluir en el menú semanal porque le va a encantar a toda la familia y sobre todo los más pequeños de la casa. A disfrutarlos!!

Vídeo de la receta