Calissons

Los calissons son un dulce típico de la región de Provenza, en el sur de Francia. Su origen se remonta al siglo XV, cuando fueron creados por el confitero Jean-Baptiste Gautin en la ciudad de Aix-en-Provence, desde donde la popularidad de esta pequeña delicia, fue extendiéndose por toda Francia.

La tradición de estos dulces está muy asociada a la festividad de la Navidad, aunque cierto es, que hoy en día se consumen durante todo el año porque se pueden encontrar fácilmente en pastelerías y confiterías. De hecho, se ha convertido en un dulce tan popular, que se suelen ofrecer como regalo o como parte de la mesa de postres en ocasiones especiales.

El método de preparación de estos deliciosos bocados dulces no es muy complicado y requiere de ingredientes fáciles de encontrar. La receta tradicional incluye almendras molidas, azúcar glas, mermelada de albaricoque, mermelada de naranja, clara de huevo y una fina capa de glaseado de azúcar. Los ingredientes se mezclan y se amasan hasta obtener una pasta homogénea, que luego se corta en forma de óvalo y se cubre con el glaseado de azúcar.

Los calissons se pueden disfrutar solos como un dulce individual, pero también se pueden acompañar de diferentes maneras. En Provenza, se suelen servir con un vaso de vino dulce, como el Muscat de Beaumes-de-Venise. También se pueden acompañar con una taza de té o café, o incluso con un licor digestivo si se disfrutan después de las comidas.

Información de la receta

• Raciones: 8 personas
• Calorías por ración (kcal): 388
• Tiempo de preparación: 15 minutos
• Tiempo de cocinado: 20 minutos
• Tiempo total: 35 minutos
• Tipo de cocina: francesa
• Categoría: dulces

Ingredientes de los calissons

• 250 gr de almendras molidas
• 250 gr de azúcar glas
• 80 gr de mermelada de albaricoque
• 80 gr de mermelada de naranja

Para el glaseado:

• 180 gr de azúcar glas
• 1 clara de huevo

Cómo preparar calissons

Comenzamos colocando la almendra molida en una cazuela junto con el azúcar glas y las mermeladas de albaricoque y naranja. Seguidamente, mezclamos bien y calentamos a fuego medio durante 10 minutos, removiendo de forma constante para evitar que la masa llegue a pegarse en el fondo de la cazuela.

Retiramos del fuego, sacamos la masa y dejamos que se enfríe un poco para poderla trabajar. Una vez se encuentre atemperada, espolvoreamos un poco de azúcar glas sobre la mesa de trabajo, amasamos la masa durante un par de minutos y estiramos con la ayuda de un rodillo hasta obtener una capa de un centímetro de grosor aproximadamente.

Con un cortador de calissons o algún utensilio parecido, vamos cortando porciones de unos 5 cm de largo con la forma ovalada característica de este dulce. Aprovecharemos los recortes sobrantes de la masa, para volver a cortar más porciones, y a medida que los vamos cortando, los iremos dejando con cuidado sobre una bandeja de horno forrada con papel de hornear.

Una vez los tengamos todos colocados en la bandeja del horno, preparamos la glasa. Para ello, mezclamos el azúcar glas con la clara de huevo en un recipiente y con una espátula de cocina, cubrimos delicadamente cada uno de los calissons, formando una capa que se encuentre bien distribuida y deshaciendo las pequeñas burbujas que se puedan formar.

Precalentamos el horno a 160º C y cuando alcance la temperatura, introducimos la bandeja y apagamos el horno. Dejamos que se hagan los calissons con el calor residual durante 5-7 minutos, sacamos la bandeja del horno, y esperamos hasta que se enfríen antes de llevarlos a la mesa.

Resumen fácil de la receta

1. Mezclar en una cazuela la almendra molida, el azúcar glas y las mermeladas.
2. Calentar a fuego medio durante 10 minutos y removiendo constantemente.
3. Retirar del fuego y dejar atemperar.
4. Extender la masa con un rodillo sobre una superficie ligeramente espolvoreada con azúcar glas, hasta obtener una capa de un centímetro de grosor.
5. Cortar las porciones de calissons y colocarlas en la bandeja de horno forrada con papel vegetal.
6. En un recipiente, mezclar los ingredientes del glaseado y cubrir delicadamente los calissons con la glasa.
7. Precalentar el horno a 160º C, introducir la bandeja, apagar el horno y dejar durante 5-7 minutos con el calor residual.
8. Sacar del horno y dejar enfriar.