Buñuelos de manzana

Unos ricos buñuelos de manzana de la abuela pueden llegar a ser una opción estupenda para acompañar un cafecito a media tarde, o simplemente darte un caprichito a cualquier hora del día, pues no es de extrañar que termines preparando una buena tanda y se terminen el mismo día, eso es lo que tienen este tipo de dulces, que empiezas y no puedes parar.

Los buñuelos de manzana y canela que vamos a preparar hoy, nada tienen que envidiar a otros que ya hemos probado, como los buñuelos de viento tradicionales, los buñuelos de plátano o los buñuelos de naranja, pues todos ellos están realmente deliciosos y son muy fáciles de hacer, solo hay que preparar la masa y freírlos en abundante aceite caliente hasta que se doren para luego, espolvorearlos con azúcar.

Información de la receta

• Raciones: 4 personas
• Calorías por ración (kcal): 255
• Tiempo de preparación: 20 minutos
• Tiempo de cocinado: 10 minutos
• Tiempo total: 30 minutos
• Tipo de cocina: Internacional
• Categoría: Postres

Ingredientes para los buñuelos de manzana

• 150 gr de harina
• 1 manzana
• 100 ml de leche
• 1 huevo
• 60 gr de azúcar
• 1 sobre de levadura química
• Canela molida
• Aceite de girasol
• Sal

Cómo hacer unos buñuelos de manzana

Empezamos esta receta añadiendo en un recipiente los siguientes ingredientes; primero echaremos  la harina tamizada, añadimos después el sobre de levadura, lo mezclamos y seguimos con una pizca de sal, el azúcar y una cucharadita de canela para darle más sabor. Removemos bien hasta que todos los ingredientes se integren.

Ahora agregamos el huevo, una taza pequeña de leche, lo mezclamos bien y reservamos para después. Continuamos pelando la manzana, la vaciamos de pepitas y la pasamos por la batidora para seguidamente añadirla a la mezcla del recipiente. Lo removemos todo para que la mezcla sea homogénea y lo dejamos reposar durante 2 horas aproximadamente cubriendo el recipiente con papel film.

Pasado el tiempo indicado, cogemos una sartén, le añadimos bastante aceite y lo ponemos a calentar al fuego. Cuando lo tengamos bien caliente, iremos añadiendo porciones de la mezcla que vamos cogiendo con ayuda de una cuchara sopera. Si al freírse vemos que nuestros buñuelos nos salen pequeños, añadimos mas mezcla en la siguiente tanda.

Les vamos dando vueltas, para que se hagan y se doren por todos los lados. Cuando estén listos, los retiramos sobre una fuente cubierta con papel absorbente para retirar el aceite sobrante.

Por último solo nos queda espolvorearlos con azúcar al gusto, los dejamos enfriar y en 15 minutos ya podemos disfrutarlos solos o en compañía de un licorcito, un café o un té.