Hígado de ternera con cebolla

Hoy quiero compartir una receta muy sencilla que se hacía en muchos hogares años atrás, ya que era una receta económica y muy sabrosa, el hígado de ternera con cebolla. En realidad esta misma receta la podemos preparar igualmente con hígados de ternera, cerdo o pollo, ya que la elaboración es exactamente la misma.

Aunque hoy en día no es tan popular el consumo de casquería, tenemos que mencionar que el hígado de ternera es una fuente natural de vinaminas B12 y K entre otras, siendo un alimento apto para diabéticos ya que no contiene nada de azúcares.

Información de la receta

• Raciones: 4 personas
• Calorías por ración (kcal): 196
• Tiempo de preparación: 10 minutos
• Tiempo de cocinado: 25 minutos
• Tiempo total: 35 minutos
• Tipo de cocina: Internacional
• Categoría: Carnes

Ingredientes necesarios

• 500 gr de hígado de ternera
• 1 cebolla grande
• 1 chorrito de vino blanco
• Pimienta molida
• Aceite de oliva
• Sal

Preparación del hígado de ternera con cebolla

Primero vamos a pelar la cebolla y a cortarla en aros no muy finos, los pochamos en una sartén con un chorro de aceite caliente y una pizca de sal. Removemos de vez en cuando.

Aprovechamos mientras se hace la cebolla para limpiar los hígados y cortarlos al tamaño que deseemos, teniendo en cuenta que al cocinarlo reducirá bastante su tamaño. Reservamos.

Cuando la cebolla ya se haya vuelto transparente, añadimos un chorrito de vino blanco y aumentamos un poco el fuego para que el alcohol se evapore fácilmente. Cuando la cebolla haya cogido un color caramelizado la retiramos y reservamos.

Ahora utilizamos la misma sartén y ponemos un chorro de aceite a calentar a fuego medio. Cuando el aceite haya cogido temperatura, añadimos los hígados limpios y troceados, salpimentamos a nuestro gusto y salteamos por ambos lados hasta que se hagan bien, teniendo en cuenta que no tardan mucho en hacerse.

Apagamos el fuego y añadimos los aros de cebolla, removemos bien para que se mezclen todos los sabores y ya podemos servirlos directamente para comerlos calentitos. Puedes servirlos con una ensalada para completar cualquier comida o cena.

Resumen fácil de la receta

1. Pochar la cebolla cortada en aros finos en una sartén con un poco de aceite y una pizca de sal.
2. Añadir el vino blanco y dejar que el alcohol se evapore.
3. Retirar la cebolla cuando coja un color caramelizado.
4. Salpimentar el hígado cortado en trozos de bocado y saltear con un poco de aceite en una sartén.
5. Apagar el fuego y añadir la cebolla, mezclar bien y servir.