Aros de cebolla crujientes: una receta fácil y rápida
Tienes que probar esta forma de cocinar los aros de cebolla. Quedan jugosos y crujientes, perfectos como aperitivo o acompañados de una buena ensalada. No te los puedes perder.
Hoy quiero mostrarte cómo cocinar unos deliciosos aros de cebolla crujientes, son jugosos, adictivos y con esta receta quedarán bien crujientes.
Después de probar estos aros de cebolla, seguro que no probarás ninguna otra receta, son los mejores que he probado nunca. Y si los acompañas con tus salsas preferidas, se convierten en un aperitivo perfecto.
ÍNDICE DE CONTENIDOS
Información de la receta
- Raciones: 4 personas
- Calorías por ración (kcal): 180
- Tiempo de preparación: 5 minutos
- Tiempo de cocinado: 15 minutos
- Tiempo total: 20 minutos
- Tipo de cocina: internacional
- Categoría: aperitivos
Ingredientes de los aros de cebolla
- 2 cebollas grandes
- 125 gr de harina
- 320 ml de agua con gas fría
- ½ cucharadita de levadura en polvo
- ¼ de cucharadita de pimienta de cayena
- 1 cucharadita de ajo en polvo
- ¼ de cucharadita de pimienta negra
- 1 cucharadita de sal
- Pan rallado
- Aceite para freír
Cómo preparar aros de cebolla crujientes
Pelamos las cebollas, luego las cortamos en rodajas de aproximadamente medio centímetro de grosor y separamos los anillos para que queden sueltos. Reservamos en un plato y continuamos con la preparación.
En un recipiente ahora hacemos una mezcla con la harina, la maicena, la pimienta de cayena, la pimienta, el ajo en polvo, el polvo para hornear y la sal. Una vez lo tengamos bien mezclado, añadimos poco a poco el agua mientras batimos al mismo tiempo hasta obtener una masa espesa y suave.
Ponemos a calentar abundante aceite para freír en una sartén a fuego medio y cuando ya esté bien caliente, vamos pasando los aros primero por la masa que hemos elaborado y luego por el pan rallado. Inmediatamente los vamos añadiendo a la sartén, donde los freímos 1-2 minutos por cada lado hasta que queden doraditos y crujientes.
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A medida que los vayamos haciendo, los iremos sacando y los pondremos sobre una fuente forrada con papel de cocina para que absorba el aceite sobrante. Repetimos la operación hasta terminar con todos los aros de cebolla. Ahora ya solo queda servirlos directamente a la mesa para comerlos calentitos.
Resumen fácil de la receta
- Pelar y cortar las cebollas en rodajas.
- Mezclar la harina, maicena y especias.
- Verter el agua poco a poco y seguir mezclando hasta obtener una masa espesa.
- Pasar los aros de cebolla por la mezcla y luego por pan rallado.
- Freír en aceite caliente hasta que estén dorados y crujientes.
Los aros de cebolla quedaron increíblemente crujientes, con ese toque dorado perfecto. ¡Una delicia que no puedo dejar de comer! Definitivamente los volveré a hacer.