Según los expertos, es recomendable utilizar un cuchillo afilado para cortar cebollas, enfriarlas o incluso invertir en aparatos especiales.

Las cebollas han desarrollado una vía bioquímica para protegerse de los depredadores. Cuando se abren las células de una cebolla, liberan la enzima aliinasa, junto con compuestos conocidos como sulfóxidos de cisteína. A través de una serie de reacciones químicas posteriores, se crea un gas volátil llamado S-óxido propanetial que se propaga en el aire. Para eliminar los gases de los ojos y protegerse, los ojos lagrimean.

No todos los tipos de cebolla son igualmente irritantes: las cebollas dulces contienen menos azufre que las rojas, blancas y amarillas, por lo que suelen producir una reacción menos intensa.

Cómo cortar cebollas para que dejes de llorar

Las lágrimas al cortar cebolla son causadas por un gas irritante que se libera al cortar la cebolla. Para evitar este molesto efecto, debemos actuar sobre dos frentes: impedir la liberación del gas o bloquear su camino hacia los ojos.

La ventilación es clave. Al cortar la cebolla en un lugar bien ventilado, el gas se dispersa rápidamente, reduciendo su concentración cerca de los ojos. Asegúrate de que el flujo de aire sea descendente, alejando el gas de tu rostro.

Utilizar un cuchillo bien afilado

Un cuchillo afilado es tu mejor aliado al cortar cebollas. Al realizar cortes precisos y limpios, se dañan menos células de la cebolla, lo que reduce significativamente la liberación del gas irritante que provoca el lagrimeo.

Un cuchillo sin filo, por el contrario, desgarra las células, liberando una mayor cantidad de gas y prolongando la exposición a este. Además, un cuchillo afilado facilita el corte, haciendo que la tarea sea más rápida y menos frustrante.

Introduce la cebolla en el frigorífico antes de cortarla

Lo único que tienes que tener en cuenta es organizar tu tiempo para meter las cebollas en el frigorífico al menos 45 minutos antes de empezar a cocinar. Las reacciones químicas se ralentizan a temperaturas más bajas.

Intenta trabajar rápido. A medida que la cebolla se calienta, sentirás que te empiezan a picar los ojos. Sin embargo, ten en cuenta que mantener las cebollas en el refrigerador durante mucho tiempo puede hacer que se echen a perder más rápido, por lo que solo debes utilizar este método cuando planees usarlas de inmediato.

Utiliza protección para los ojos

Las gafas estándar o de sol pueden ayudar, pero también hay gafas especiales para cortar cebollas. Si no las encuentras, las gafas de natación son las más efectivas.

Usa varios gadgets

Compra un buen procesador de alimentos que tenga cuchillas para picar o raspar. Reducirás las posibilidades de llorar porque el tiempo de exposición es menor y la cebolla está en un ambiente cerrado.

Una alternativa más económica es el picador de verduras, que puedes utilizar con casi cualquier tipo de ingredientes y ahorrarás mucho tiempo en prepararlos.