Flan de queso casero, receta fácil de la abuela

Con esta receta fácil de la abuela vas a conseguir degustar un delicioso flan de queso casero. Sigue las indicaciones que te muestro y aprenderás cómo se hacen unos flanes muy ricos y cremosos.

Flan de queso casero

El flan de queso es un postre popular en muchos países latinoamericanos y se caracteriza por su textura suave y cremosa. Se hace con ingredientes simples que se pueden encontrar en cualquier supermercado, como leche, huevos, leche condensada, queso mascarpone y azúcar. Se cocina en el horno al baño maría en un moldes individuales y se sirve frío con un baño de caramelo casero.

La preparación del flan de queso es bastante sencilla y no requiere habilidades culinarias avanzadas. Primero, se hace un caramelo casero con azúcar y agua y se coloca en el fondo de los moldes individuales. Luego, se mezclan los ingredientes, incluyendo la leche condensada, la leche entera, el queso mascarpone, los huevos y el azúcar, hasta que la mezcla quede suave. Se vierte sobre el caramelo de los moldes y se cocina al baño maría en el horno durante aproximadamente 40 minutos.

Después de enfriar, se desmolda y se sirve, dando como resultado un postre delicioso y fácil de hacer, que además es perfecto para cualquier ocasión.

Información de la receta

  • Raciones: 6 personas
  • Calorías por ración (kcal): 199
  • Tiempo de preparación: 10 minutos
  • Tiempo de cocción: 50 minutos
  • Tiempo de refrigeración: 2 horas
  • Tiempo total: 3 horas
  • Tipo de cocina: internacional
  • Categoría: postre

Ingredientes del flan de queso

  • 150 ml de leche entera
  • 100 ml de leche condensada
  • 250 gr de queso mascarpone
  • 3 huevos
  • 1 cucharada de azúcar vainillado

Para el caramelo:

  • 5 cucharadas de azúcar
  • 3 cucharadas de agua
  • Unas gotas de jugo de limón

Cómo preparar flan de queso casero

Comenzamos por hacer el caramelo, para ello, calentamos una sartén o cazo a fuego medio-alto con el azúcar y el agua. El azúcar se irá disolviendo y comenzará a burbujear. Tendremos que esperar hasta que coja un color doratito. Retiramos del fuego y añadimos tres gotitas de jugo de limón mientras removemos con una paleta de cocina para evitar que se cristalice. El caramelo hay que manipularlo con cuidado, pues podemos sufrir quemaduras importantes.

Distribuimos el caramelo en seis moldes individuales y mientras se enfría, continuamos con la receta para hacer los flanes.

Batimos los huevos en un bol con la ayuda de unas varillas eléctricas. Vertemos la leche entera, la leche condensada, añadimos el azúcar vainillado y el queso mascarpone. Batimos de nuevo hasta que todos los ingredientes queden bien integrados.

Precalentamos el horno a 200º C. con calor por arriba y por abajo. Rellenamos los moldes con la mezcla y los colocamos en una fuente apta para el horno y con dos dedos de agua, así haremos nuestros flanes en el horno al baño maría.

Cubrimos los flanes con papel de aluminio y metemos la fuente en el horno durante 40 minutos. Sacamos los flanes del horno y los dejaremos sobre una rejilla hasta que se enfríen por completo. Introducimos los flanes en la nevera y los dejaremos durante dos horas como mínimo, aunque mejor es si los dejamos de un día para otro.

Transcurrido ese tiempo, desmoldamos y servimos en la mesa a la hora del postre. Puedes decorar los flanes con unas hojitas de menta o acompañarlos con nata montada.

Flan de queso casero
Flan de queso casero.

Vídeo de la receta

Resumen fácil de la receta

  1. Calentar en un cazo el azúcar y el agua a fuego medio-alto para hacer el caramelo.
  2. Retirar cuando tenga un color doradito y esté burbujeando.
  3. Distribuir el caramelo en los moldes individuales.
  4. Batir los huevos en un recipiente junto con la leche, la leche condensada, el azúcar vainillado y el queso mascarpone.
  5. Rellenar con la mezcla los moldes de los flanes y colocarlos en una fuente con dos dedos de agua.
  6. Cubrir con papel de aluminio e introducir en el horno previamente precalentado a 200º C.
  7. Hornear durante 40 minutos, sacar los flanes y dejar que se enfríen a temperatura ambiente.
  8. Introducir en la nevera un mínimo de dos horas antes de desmoldar y consumir.

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