Salmorejo casero

El salmorejo es un plato típico español originario de la región de Andalucía, en el sur del país. Su posible origen se remonta al siglo XIX y principios del siglo XX, cuando se empezó a preparar con los ingredientes que hoy en día lo componen, aunque según el historiador Villegas, el término salmorejo se utilizó en el siglo XVII para referirse a una sopa de tomate con pan. Aunque su origen es humilde, el salmorejo se ha convertido en uno de los platos más populares de la gastronomía española.

Este plato se consume sobre todo fresquito en los meses calurosos de verano, y se elabora con ingredientes sencillos y frescos, como tomates, pan, aceite de oliva, ajo y sal. La preparación consiste en triturar todos los ingredientes hasta obtener una crema suave y homogénea.

Aunque la receta básica de salmorejo es la misma en toda Andalucía, existen variaciones regionales. Por ejemplo, en las provincias de Córdoba y Huelva, se añade huevo cocido y taquitos de jamón serrano, o en Antequera, una localidad de la provincia de Málaga, se prepara un plato similar llamado porra antequerana, que se diferencia del salmorejo en que tiene una textura más densa y además se le añade pimiento.

Además de las variaciones regionales, el salmorejo también se puede adaptar a diferentes gustos y preferencias personales. Algunas personas prefieren agregar vinagre o limón para darle un toque ácido, mientras que otras prefieren una consistencia más líquida o más espesa. Aunque el salmorejo tiene cierta similitud con el gazpacho, otro plato popular de la gastronomía española, no hay que confundirlo porque existen diferencias notables entre ellos, como la textura y la adición de pimiento y pepino en el gazpacho.

En esta ocasión, vamos a preparar un delicioso salmorejo cordobés que nada tiene que ver con el que venden en el supermercado, pues vamos a seguir los pasos de la receta tradicional de la abuela y nos quedará un salmorejo mucho más rico y saludable.

Información de la receta

• Raciones: 4 personas
• Calorías por ración (kcal): 78
• Tiempo de preparación: 10 minutos
• Tiempo total: 10 minutos
• Tipo de cocina: española
• Categoría: entrante

Ingredientes del salmorejo

• 1 kg de tomates maduros
• 150 gr de pan duro del día anterior
• 100 gr de taquitos de jamón serrano
• 3 huevos cocidos
• 1 diente de ajo
• 6 cucharadas de vinagre
• 125 ml de aceite de oliva virgen extra
• 1 cucharadita de sal

Cómo preparar salmorejo casero

Lo primero que tenemos que hacer es lavar bien los tomates y cortarlos a trozos. Introducimos los tomates troceados en el vaso de la batidora (puedes comprarla aquí) y procesamos hasta lograr una mezcla homogénea.

Pelamos el diente de ajo, le retiramos el germen o la parte central de color verde y lo añadimos al tomate. Agregamos el vinagre, una pizca de sal y el pan previamente troceado, el cual vamos incorporando poco a poco mientras no dejamos de triturar todo con la batidora.

Ahora echamos el aceite de oliva poco a poco mientras continuamos batiendo hasta conseguir que todo quede bien integrado. Rectificamos el punto de sal si es necesario y metemos en el frigorífico para que se refresque.

Por último, cuando esté bien fresquito, emplatamos y distribuimos por encima los taquitos de jamón serrano y los huevos cocidos previamente rallados o picados. Buen provecho!!

Trucos para un salmorejo perfecto

A mi me gusta el salmorejo cordobés así tal cual te he mostrado, pero si lo prefieres con una textura mas suave, puedes pasar los trozos de tomate por el pasapurés (puedes comprarlo aquí), con ello evitarás encontrarte posibles restos de semillas o piel.

Si no tienes en estos momentos unos taquitos de jamón serrano, los puedes sustituir por unos picatostes de pan, de una forma o de otra, te aseguro que este salmorejo está riquísimo.

Otras sopas de tomate que te recomiendo

Las sopas o cremas de tomate son muy sencillas de preparar, se suelen tomar tanto fresquitas o calientes, dependiendo de la estación. Son un entrante ideal para una comida copiosa o para acompañar con otros platos. A continuación te dejo con varias recetas donde el tomate es el protagonista:

La sopa de tomate y albahaca, va acompañada en su elaboración de zanahorias entre otros ingredientes, lo que ayuda a que tenga un sabor más dulce, está buenísima!.

La sopa de tomate, hecha con caldo de pollo, al final se le incorpora un poco de queso rallado, sin duda muy nutritiva y saludable.

El tradicional gazpacho andaluz, se toma fresquito, su sabor junto al pepino y el pan lo convierten en un plato apetecible y muy recurrente para aliviar en los días de mucho calor.