Tarta Tatin de manzana
Con esta receta fácil aprenderás a preparar una auténtica tarta Tatin de manzana. Un postre francés que aunque lleva su tiempo, te aseguro que merece la pena.
Hoy vamos a preparar una auténtica tarta Tatin de manzana. Una variante francesa de la tradicional tarta de manzana. El procedimiento de elaboración fue inventado por las hermanas Tatin, y tuvo su origen en una equivocación que tuvieron.
Preparar esta tarta es muy fácil siguiendo los sencillos pasos que te mostraremos a continuación. Si quieres un dulce postre que no sea muy complicado, este es el tuyo. Vamos a ponernos ya en la cocina.
ÍNDICE DE CONTENIDOS
Información de la receta
- Raciones: 6 personas
- Calorías por ración (kcal): 366
- Tiempo de preparación: 20 minutos
- Tiempo de cocinado: 50 minutos
- Tiempo total: 1 hora y 10 minutos
- Tipo de cocina: Francesa
- Categoría: Postres
Ingredientes de la tarta Tatin
- 1 lámina de hojaldre
- 5 manzanas
- 120 gr de mantequilla
- 250 gr de azúcar
Cómo hacer tarta Tatin de manzana
El primer paso para hacer esta rica tarta Tatin es pelar y cortar en forma de gajos gruesos las manzanas. Ahora ponemos en una sartén de unos 24 cm de diámetro la mantequilla y el azúcar a fuego medio.
Cuando la mantequilla se haya derretido, colocamos los gajos de manzana, intentando que queden lo mas apretados posible y sin amontonarse. Cocinamos unos 10 minutos y bajamos el fuego al mínimo. Cocinamos otros 40 minutos mas aproximadamente removiendo de vez en cuando. Retiramos y dejamos que se temple.
Precalentamos el horno a 180º C. Mientras tanto y utilizando una tapa u otro utensilio que tengamos con un diametro de 24-26 cm, cortamos la lámina de hojaldre en forma de círculo.
Pasamos la manzana a una fuente redonda (de 24 cm de diámetro) apta para el horno. Ponemos el disco de hojaldre encima, hacemos unos pinchacitos por encima con un cuchillo y lo metemos en el horno. Horneamos durante 20 minutos aproximadamente, hasta que la masa quede doradita.
Sacamos del horno y la dejamos reposar durante 15 minutos. Ahora ponemos el plato donde la vamos a servir, girado y encima del hojaldre. Con cuidado pero con seguridad, damos la vuelta a la fuente con la manzana y el hojaldre. De tal forma que nos quede en el plato todo girado.
Por último lo podemos servir a la mesa directamente si la queremos comer aún templadita o la podemos meter 30 minutos en el frigorífico para comerla fresquita. Esto ya depende de los gustos de cada uno, lo que si que es seguro, es que gustará a todos los comensales.