Crema catalana
Este es un postre dulce muy popular de la gastronomía catalana y que además de ser una delicia, su preparación es tan sencilla que te llegará a sorprender. Aprende a preparar la auténtica crema catalana de toda la vida.
Si has estado alguna vez en Cataluña seguro que ya habrás probado la famosa crema catalana. Se trata de un postre muy similar a las natillas pero algo más espeso y un toque de sabor a canela y limón muy característico.
La crema catalana, también conocida como crema quemada, es un postre que consiste en una crema elaborada a base de yema de huevo, la cual se cubre con una capa de azúcar caramelizado justo antes de servirla a la mesa.
Aunque la crema catalana se consume durante todo el año, en Cataluña es costumbre prepararla para el «Día del padre», el cual se celebra el 19 de marzo con motivo del «Día de San José«.
En esta ocasión te voy va mostrar una receta de crema catalana que nos ha enviado Claudia Pitarch de Barcelona, una lectora y amiga de Recetinas. Yo ya la he probado y está super deliciosa, así que muchas gracias Claudia por quererla compartir.
ÍNDICE DE CONTENIDOS
Información de la receta
- Raciones: 4 personas
- Calorías por ración (kcal): 340
- Tiempo de preparación: 10 minutos
- Tiempo de cocinado: 20 minutos
- Tiempo de refrigeración: 4 horas
- Tiempo total: 4 horas y 30 minutos
- Tipo de cocina: española
- Categoría: postres
Ingredientes de la crema catalana
- Las yemas de 8 huevos
- 200 gr de azúcar
- 1 litro de leche
- 30 gr de maicena
- 1 ramita de canela
- La cáscara de 1 limón
- Azúcar para la cobertura
Cómo preparar crema catalana
Empezamos pelando la cáscara del limón, intentando que quede todo en una tira larga y procurando utilizar solo la parte amarilla de la misma, ya que la parte blanca es muy amarga y podría estropear nuestro postre.
Seguidamente mezclamos las yemas de huevo en un recipiente junto con el azúcar hasta que queden totalmente integradas.
En un cazo vamos a poner la leche (menos un cuarto de taza que reservamos) a calentar a fuego medio junto con la cáscara del limón y la ramita de canela para que se aromatice.
Mientras se va calentando la leche, diluimos la maicena en la leche de la taza que habíamos reservado y cuando esté bien diluida, la incorporamos al cazo. Removemos la leche poco a poco con una cuchara de madera hasta momentos antes de que comience a hervir.
Es el momento de retirar el cazo del fuego, dejamos reposar durante 3-4 minutos y extraeremos la ramita de canela y la piel del limón. Yo lo que hago es colarla con un colador, así me aseguro de retirar cualquier trocito de limón o canela.
Incorporamos la leche a la mezcla que habíamos preparado de las yemas de huevo con el azúcar y continuamos removiendo bien hasta que todos los ingredientes se integren completamente.
Ahora volvemos a poner el cazo en el fuego, pero esta vez a fuego medio-bajo. Removemos con unas varillas constantemente hasta que se convierta en una mezcla de consistencia cremosa y espesa. Su punto idóneo es cuando al pasar las varillas se forman surcos sobre la crema.
Retiramos la crema del fuego y la distribuimos en recipientes individuales. Yo utilizo unos cuencos o de barro individuales, pero también puedes utilizar cualquier recipiente que no sea muy hondo.
Dejamos que la crema catalana se enfríe a temperatura ambiente y después introducimos en el frigorífico para que se refrigere y para que cuaje la crema durante 3-4 horas.
Al momento de servir nuestra crema catalana, añadimos una buena capa de azúcar por encima (yo he utilizado 1½ cucharadas por cada una) y con un soplete de cocina quemaremos el azúcar hasta que se caramelice, formando así una capa fina de caramelo. También se puede hacer con una pala de quemar, pero este utensilio es complicado de conseguir.
En el caso de no disponer de soplete de cocina, podemos añadir un poco de azúcar moreno por encima, aunque no quedará con caramelo crujiente, es una opción para salir del paso. Ahora ya podemos disfrutar de una auténtica crema catalana casera. Buen provecho!!
Consejos para hacer una crema catalana perfecta
La mejor leche para hacer la crema catalana es la leche entera, aunque yo también la he probado con leche semidesnatada y también queda bastante bien. Evita en todo momento hacerla con leche desnatada, ya que la textura de la crema no quedará muy bien.
Es importante retirar la leche emulsionada con limón y canela antes de que comience a hervir, así evitaremos la formación de nata.
Para aromatizar la leche también se puede añadir la piel de media naranja (evitando la parte blanca) y las semillas de una vaina de vainilla. Aunque estos ingredientes son opcionales, transfieren a nuestra crema catalana un toque de sabor muy especial.
Cuanto más tiempo tengamos la crema catalana en el frigorífico, más consistente quedará, el mínimo recomendado es de cuatro horas, pero yo te recomiendo que la tengas refrigerada durante toda una noche.
La crema catalana se sirve en recipientes de poca altura y generalmente de barro, de forma que la ración quede con un espesor de entre 1 y 2 centímetros. También he visto que hay quien la sirve en vasos con un espesor de crema exagerado, pero esa no es la manera correcta de servir una auténtica crema catalana tradicional.
La mejor crema catalana que he probado en mi vida, y eso que he comido muchas. Gracias por la receta, la tengo guardada como una de mis preferidas.