Los aperitivos que son fáciles y rápidos de preparar son los que más me gustan, y si además son de esos que están muy ricos mejor que mejor. Es el caso de estas gulas al ajillo que vamos a preparar hoy, un plato tradicional que aunque se puede hacer durante todo el año, es bastante habitual en las comidas y cenas de Navidad.
En esta ocasión he preparado las gulas también con unos mejillones y unas almejas, lo cual ayuda a obtener un resultado un poquito más completo y en cuanto a sabor, estos ingredientes le añaden un toque a mar que te va a encantar.
Receta de gulas al ajillo con mejillones y almejas
Ingredientes para preparar gulas al ajillo
Con estas cantidades tendremos para 2 personas:
- 250 gr de gulas
- 8 mejillones
- 12 almejas
- 3 dientes de ajo
- 1 guindilla (opcional)
- 1 hoja de laurel
- Perejil fresco picado
- 3 cucharadas de aceite de oliva
- Sal
Cómo cocinar unas gulas al ajillo con almejas y mejillones
- Limpiamos los mejillones y las almejas y lo ponemos todo en una cazuela.
- Añadimos medio vaso de agua, la hoja de laurel y calentamos a fuego fuerte.
- Cocemos durante 3-4 minutos hasta que los mejillones y las almejas se abran. Retiramos y reservamos.
- Ponemos a calentar el aceite en una sartén a fuego medio.
- Pelamos y cortamos a láminas los dientes de ajo.
- Cuando el aceite esté ya caliente, añadimos los ajos laminados y sofreímos durante 3-4 minutos hasta que comiencen a coger color.
- Agregamos la guindilla y sofreímos durante un minuto más removiendo para que la guindilla impregne de sabor picante todo el aceite.
- Bajamos el fuego a medio y añadimos las gulas junto con una pizca de sal y perejil picado al gusto. Salteamos durante un par de minutos y retiramos del fuego.
- Emplatamos nuestras gulas en unas cazuelitas de barro individuales y agregamos los mejillones sin cáscara y las almejas que habíamos cocido anteriormente. Buen provecho!!
Comentarios y sugerencias
Estas gulas me encantan con el sabor picantito de la guindilla, pero si a ti no te gusta el picante, puedes omitir la guindilla porque igualmente quedan riquísimas.
Personalmente me gusta servir este aperitivo recién hecho directamente a la mesa para comerlo calentito, pero hay quien lo prepara con antelación y luego le da un golpe de calor en la sartén antes de emplatar.