Crema fría de pepino, receta fácil y rápida de un plato saludable y refrescante
Esta crema fría de pepino es una opción estupenda para refrescarnos los días calurosos de verano. Es súper rápida de preparar, pues estará lista en menos de 10 minutos. Además es una receta muy sencilla de elaborar.
Hay quien lo conoce como gazpacho de pepino, otros como sopa fría de pepinos, pero yo creo que más bien es una crema fría de pepino, sobre todo por su consistencia y textura. El caso es que se ha convertido en mi casa en una buena opción refrescante y nutritiva para este verano.
Desde que he probado esta deliciosa crema, la he incorporado a mi selección personal de recetas de sopas y cremas para el verano, junto con el tradicional gazpacho y la sabrosa porra antequerana que publiqué la semana pasada.
Lo que más me gusta de esta receta además de su aporte nutricional, es que la puedes preparar un menos de diez minutos. Después sólo queda esperar a que se enfríe en la nevera, porque eso sí, a mi me gusta bien fresquita para combatir el calor en pleno verano.
ÍNDICE DE CONTENIDOS
Información de la receta
- Raciones: 4 personas
- Calorías por ración (kcal): 106
- Tiempo de preparación: 10 minutos
- Tiempo de refrigerado: 2 horas
- Tiempo total: 2 horas y 10 minutos
- Tipo de cocina: internacional
- Categoría: cremas
Ingredientes de la crema fría de pepino
- 2 pepinos grandes
- 2 yogures griegos
- ½ cebolla
- 2 dientes de ajo
- 1 cucharada de vinagre de manzana
- 1 puñado de picatostes de pan (opcional)
- Menta fresca o albahaca
- Pimienta negra recién molida
- 2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
- Sal
Cómo preparar crema fría de pepino
Comenzamos lavando los pepinos y seguidamente los despuntamos, pelamos y troceamos. Pelamos y troceamos la cebolla y los dientes de ajo. Ponemos todo en el vaso de la batidora (puedes comprarla aquí) junto con los yogures griegos, el vinagre, el aceite de oliva, un par de hojas de menta fresca, una pizca de pimienta negra molida y otra de sal.
Procesamos hasta triturarlo bien todo y conseguir una crema suave y homogénea. Si te ha quedado demasiado espesa para tu gusto, puedes añadir un poco de agua.
Rectificamos el punto de sal y pimienta si es necesario y refrigeramos durante unas horas hasta que la crema esté bien fresquita.
Al momento de servir, distribuimos la crema de pepino en cuencos individuales y agregamos unos picatostes de pan. Buen provecho!!
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