Pierogi

El pierogi es un tipo de dumpling o empanadilla pequeña originaria de Europa del Este, especialmente de Polonia. Se cree que su origen se remonta al siglo XIII, cuando fue introducido en Polonia por los tártaros. Desde entonces, se ha convertido en uno de los platos más populares y tradicionales de la cocina polaca y también se ha extendido a otros países de la región como Ucrania, Rusia y Bielorrusia.

El pierogi se prepara a partir de una masa de harina de trigo que se rellena con diferentes ingredientes. Los rellenos más comunes son el queso o requesón, la patata, la cebolla y carnes como la panceta. La masa se estira y se corta en círculos, luego se rellena con la mezcla de ingredientes y se cierra formando una especie de empanadilla. Los pierogi se cocinan hirviéndolos en agua con sal hasta que floten en la superficie.

Los pierogi se pueden acompañar de diferentes formas. Una opción tradicional es servirlos con cebolla frita y mantequilla derretida por encima. También se pueden acompañar con crema agria, salsa de tomate, salsa de champiñones o simplemente con mantequilla.

El pierogi es un plato muy versátil y se puede adaptar perfectamente a los diferentes gustos y preferencias de cada comensal. Se puede disfrutar como plato principal o como acompañamiento, y es ideal para cualquier ocasión, desde comidas familiares hasta fiestas y celebraciones. Además, se suelen hacer en grandes cantidades y luego se congelan antes de cocerlos para disfrutar en otro momento.

Información de la receta

• Raciones: 4 personas
• Calorías por ración (kcal): 695
• Tiempo de preparación: 40 minutos
• Tiempo de cocinado: 30 minutos
• Tiempo total: 1 hora y 10 minutos
• Tipo de cocina: polaca
• Categoría: entrante

Ingredientes de los pierogi

• 350 gr de harina
• 3 patatas medianas
• 150 gr de requesón
• 150 gr de panceta
• 40 gr de mantequilla
• 1 cebolla
• 1 huevo batido
• Crema agria
• Aceite de oliva
• Sal

Cómo preparar pierogi polaco

Empezamos por hacer la masa de los pierogi. Para ello, colocamos la harina previamente tamizada en un bol, formamos un hueco en el centro y agregamos el huevo batido, 150 ml de agua y una pizca de sal.

Mezclamos hasta que veamos que podemos trabajar la masa con las manos. Volcamos la masa en una superficie lisa y ligeramente enharinada, y amasamos hasta conseguir una masa firme y que no se pega en las manos. Si es necesario, añadiremos un poco más de harina.

Formamos una bola con la masa, la colocamos en un recipiente, cubrimos con film transparente, y metemos en el frigorífico durante una hora.

Mientras tanto, cocemos las patatas en una olla con abundante agua hirviendo durante 30 minutos, o hasta que estén bien cocidas. Sacamos las patatas y dejamos que se atemperen durante unos minutos antes de pelarlas.

Pochamos la cebolla bien picadita en una sartén con un chorrito de aceite de oliva a fuego medio durante 4-5 minutos. Luego escurrimos la cebolla y reservamos.

Picamos la panceta finamente y salteamos en una sartén a fuego medio y sin aceite hasta dorar. Luego escurrimos y reservamos junto con la cebolla.

Aplastamos las patatas hasta convertirlas en una especie de puré. Mezclamos con el requesón previamente desmenuzado, la panceta y la cebolla, reservando un poco de estos dos ingredientes para decorar al final nuestro plato.

Una vez estén los ingredientes del relleno bien integrados, cortamos la masa en dos porciones mas o menos iguales, estiramos con el rodillo cada porción hasta conseguir un grosor de 2 milímetros.

Seguidamente, con un cortador redondo de unos 5-6 cm de diámetro vamos cortando la masa en discos. Colocamos una cucharadita del relleno en el centro de cada uno, y luego cerramos con la ayuda de un tenedor como si fueran empanadillas. Iremos colocando los pierogi en una bandeja ligeramente enharinada y separados unos de otros. Repetimos la operación hasta terminar toda la masa.

Calentamos abundante agua con sal en una olla grande, y cuando rompa a hervir, cocemos los pierogi por tandas. Al mismo tiempo, calentamos la mantequilla en una sartén. Cuando veamos que terminan flotando en la superficie, es la señal de que están hechos, así que los escurrimos con una espumadera, y los pasamos a la sartén con la mantequilla derretida.

Salteamos durante un par de minutos y los iremos dejando en un plato o fuente. Repetimos la operación hasta tener todos los pierogi listos. Decoramos con la panceta y la cebolla que teníamos reservadas y servimos inmediatamente a la mesa, acompañados de la crema agria.

Resumen fácil de la receta

1. Mezclar la harina tamizada con el huevo batido, una pizca de sal y 150 ml de agua.
2. Trabajar la masa en una superficie ligeramente enharinada hasta que esté lisa.
3. Formar una bola, introducir en un recipiente, cubrir con film transparente y dejar en la nevera durante una hora.
4. Cocer las patatas, pelar y machacar con un tenedor.
5. Pochar la cebolla picada y reservar.
6. Pochar la panceta picada, escurrir y mezclar en un recipiente con la patata y la cebolla.
7. Estirar la masa hasta obtener 2 mm de grosor, cortar con un utensilio circular de unos 5 cm de diámetro.
8. Rellenar cada disco de masa con una cucharadita de relleno y cerrar como si fuera una empanadilla.
9. Cocer por tandas en abundante agua hirviendo con sal hasta que floten en la superficie.
10. Escurrir y saltear los pierogi en una sartén con la mantequilla derretida a fuego medio durante un par de minutos.
11. Colocar en una fuente y servir.