Tarta Mille crepês

Si le gustan las tartas sencillas y atractivas, hoy puedes preparar Tarta Mille crepê (mil crepes). Originaria de Francia, esta tarta fría se compone de capas de crepes a modo de milhojas, rellenas de crema pastelera. Se puede hacer con sabores como el café, fresa, té verde y el dulce de leche, cada cual puede hacerla a su gusto.

Son muy fáciles de montar y la verdad es que queda muy bonita una vez hecha. Si lo necesitas, puedes preparar la crema el día anterior y sólo tienes que hacer las tortitas cuando las vayas a servir. No te aconsejo dejar preparados los crepes de un día para otro, porque pese a que los conserves bien, después quedan un poco gomosos.

Si te gusta la idea de las crepes tanto como a mí, aquí tienes algunas ideas como las crepes rellenas de morcilla y manzana, una combinación de sabores entre dulce y salado muy bueno. Siguiendo en recetas saladas, las crepes rellenas de bechamel, jamón y queso, son perfectas para hacer en sustitución de los sanjacobos tradicionales. Y para la cena, unas crepes de salchichas y queso, son una decisión sencilla y deliciosa para acabar el día.

Información de la receta

• Raciones: 6 personas
• Calorías por ración (kcal): 300
• Tiempo de preparación: 20 minutos
• Tiempo de Reposo: 30 minutos
• Tiempo de Refrigeración: 2 horas
• Tiempo de cocinado: 25 minutos
• Tiempo total: 3 horas y 15 minutos
• Tipo de cocina: Francesa
• Categoría: Postres

Ingredientes de la tarta mille crepês

• 100 gr de harina de trigo
• 3 huevos
• 700 ml de leche entera
• 50 gr de margarina
• 4 yemas de huevo
• 1 ramita de canela
• 1 cucharadita de esencia de vainilla
• 120 gr de azúcar
• 2 cucharadas de maicena
• 1 pizca de sal

Cómo hacer tarta mille crepês

Ponemos la harina tamizada en un bol grande, hacemos un hueco central y cascamos los huevos dentro, añadimos la sal y con unas varillas metálicas, mezclamos estos ingredientes.

Vertemos 200 ml de la leche y vamos removiendo hasta disolver los grumos. Dejamos reposar la mezcla por 30 minutos.

Derretir la margarina en una sartén de 21 cm a fuego lento, añadirla a la mezcla anterior después del tiempo de reposo y mezclar bien.

Subimos el fuego a medio-alto y verter una cucharada en el centro de la sartén, levantando y girando la sartén para distribuirla por toda la superficie.

Movemos ligeramente la sartén para asegurarnos de que se despega después de un minuto, luego la giramos con los dedos o espátula para cocinarla por el otro lado y la colocamos en una fuente. Procedemos de la misma manera con el resto de la mezcla hasta acabarla, con estas cantidades me salieron unos 12 crepes.

Para preparar la crema pastelera, calentamos 300 ml de leche en un cazo pequeño, añadimos la rama de canela, la llevamos a ebullición y lo retiramos del fuego.

Ponemos las yemas de huevo, el azúcar y la esencia de vainilla en un bol, batimos para mezclar y reservamos.

Ponemos en cuenco, la maicena con 200 ml de leche, removemos hasta que se disuelvan los grumos y lo pasamos al bol de las yemas. Removemos hasta que se integren los ingredientes.

Incorporamos ahora la leche tibia, retiramos la ramita de canela y mezclamos. Lo volvemos a poner al fuego medio y removemos hasta que espese, luego lo sacamos del fuego.

Pasamos la crema a un recipiente y la cubrimos con papel film, de manera que esté directamente en contacto y así evitaremos que se haga una costra, dejamos que se enfríe e incluso lo podemos refrigerar.

Para montar la tarta, usamos un molde desmontable, esto es opcional, ponemos una crepre y la cubrimos con crema con ayuda de una espátula. Seguimos haciendo capas como si se tratase de una milhoja con crepes, hasta terminar arriba con una crepe.

Una vez acabada, la refrigeramos durante un par de horas en la nevera antes de servirla junto con una salsa de caramelo o un poco de miel.

Resumen fácil de la receta

1. Poner la harina tamizada en un bol grande, hacer un hueco en el centro y verter los huevos, añadir la sal y mezclar estos ingredientes con un batidor metálico.
2. Añadir 200 ml de la leche, remover y disolver los grumos.
3. Calentar la margarina y añadirla a la mezcla con la harina, batir todo y dejar reposar durante 30 minutos.
4. Poner la sartén de 21 cm al fuego, echar un cucharon con la mezcla en el centro y repartirla por toda la superficie moviendo la sartén. Voltearla cuando se despegue y dejarla durante 1 minuto por el otro lado, retirarla a una fuente a medida que las tengamos.
5. Para hacer la crema pastelera, calentar en una cazuela 300 ml de leche, añadir la ramita de canela, dejar que hierva y retirar del fuego.
6. Poner en un cuenco las yemas con el azúcar y la esencia de vainilla, mezclar y reservar.
7. En otro cuenco añadir la maicena con 200 ml de leche, remover con las varillas y añadirlo a las yemas.
8. Incorporara a esta mezcla la leche sin la ramita de canela y llevarla al fuego medio y sin dejar de remover, dejar que espese y retirar. Cubrir con papel film por encima y dejar enfriar.
9. Montar la tarta intercalando crepes con crema pastelera, refrigerar durante 2 horas y servir con una salsa dulce de caramelo o miel.