Tarta de capuchino, receta fácil paso a paso

En esta ocasión vamos a ver cómo hacer una tarta de capuchino sin utilizar el horno. En realidad se trata de una rica tarta de queso crema con un delicioso sabor a capuchino, con una textura muy similar a la de mousse y que además es muy sencilla de hacer.

Anímate a preparar esta tarta para cualquier celebración como un cumpleaños o un aniversario, con ella tendrás el éxito en la mesa asegurado.

Información de la receta

• Raciones: 6 personas
• Calorías por ración (kcal): 590
• Tiempo de preparación: 15 minutos
• Tiempo de cocinado: 5 minutos
• Tiempo de refrigeración: 6 horas
• Tiempo total: 6 horas y 20 minutos
• Tipo de cocina: internacional
• Categoría: postres

Ingredientes de la tarta de capuchino

Para la base:

• 120 gr de galletas tipo María
• 50 gr de mantequilla

Para el relleno:

• 600 gr de queso crema estilo Philadelphia
• 100 ml de café
• 120 ml de leche
• 6 hojas de gelatina neutra
• 100 gr de azúcar
• 1 cucharadita de esencia de vainilla

Para decorar:

• Nata montada
• Canela en polvo

Cómo hacer tarta de capuchino

Empezamos triturando las galletas que formarán la base de nuestra tarta, para ello metemos las galletas maría dentro de un procesador de alimentos y las trituramos hasta que queden hechas polvo. Si no disponemos de un procesador de alimentos, podemos meterlas en una bolsa de congelar alimentos con cierre zip y golpearlas con un rodillo de cocina.

Una vez que las tengamos trituradas, las pasamos a un bol y vertemos sobre ellas la mantequilla fundida previamente y revolvemos bien hasta que todo quede bien integrado. Cuando veamos que tiene una textura similar a la arena mojada y que al apretar se compacta, pasamos esta mezcla un molde desmontable cubierto con papel de hornear.

Repartimos la mezcla de galletas por toda la superficie y después presionamos con una cuchara o con una lengua pastelera hasta que quede lisa y bien compacta. Una vez que ya tengamos la base lista, la guardamos en el frigorífico.

Mientras tanto vamos a preparar el relleno, para ello primero ponemos a remojar las hojas de gelatina en un recipiente con agua bien fría. Por otro lado, en un cazo calentamos la leche a fuego medio. Cuando esté caliente pero sin que llegue a hervir, apagamos el fuego y dejamos que se siga calentando con el calor residual.

Durante este rato las hojas de gelatina ya se habrán hidratado, así que las escurrimos bien y se las agregamos a la leche. pero removemos muy bien con una cuchara hasta que se disuelva completamente. Nos aseguramos que la gelatina se haya fundido con la leche y apartamos el cazo del fuego.

A continuación en un bol grande ponemos el queso crema tipo Philadelphia junto con el azúcar, el café y la esencia de vainilla. Batimos todo con una batidora eléctrica de varillas o con una manual hasta que todo quede bien integrado.

Cuando tengamos una mezcla suave y cremosa, agregamos la leche con gelatina y seguimos batiendo hasta que se incorpore completamente. Una vez que esté incorporada, ya tendremos el relleno listo. Ahora lo vertemos dentro del molde y lo llevamos de nuevo al frigorífico.

Dejamos que se enfríe durante un mínimo de 4 horas, aunque es mejor dejarla de un día para otro. Pasado este tiempo, la sacamos y desmoldamos. Ahora llega el momento de la decoración, yo recomiendo cubrirla con una generosa capa de nata montada para simular la espuma que tiene el capuchino, pero esto lo dejo al gusto de cada uno.

Para darle el último toque de sabor y de color, espolvoreamos un poco de canela por encima y ya tendríamos nuestra tarta de capuccino lista para degustar. Como has podido comprobar, la preparación no es nada complicada y esta tarta se puede hacer para ocasiones especiales como cumpleaños o cualquier otro tipo de celebración.

Vídeo de la receta