Malakoffs

Los malakoffs son una especialidad culinaria originaria de Suiza, específicamente del cantón de Vaud. El nombre «malakoff» se deriva de la fortaleza rusa de Malakoff, que fue tomada por los franceses durante la Guerra de Crimea en 1855. Se dice que los soldados franceses, al celebrar su victoria, improvisaron una comida con los ingredientes que tenían a mano, entre los que se incluían el queso y el pan.

Se trata de una especie de croqueta o bola de queso empanizada y frita, generalmente hecha con queso gruyère, aunque también se pueden utilizar otros tipos de queso como el emmental. Se suelen servir en festivales y eventos locales de numerosas localidades de Suiza, siendo muy populares durante el carnaval de Lausana, donde se venden en puestos callejeros y se consumen con un gran entusiasmo.

La preparación de los malakoffs implica mezclar el queso rallado con huevo, harina, vino blanco, ajo picado, formar bolas o croquetas, empanarlas con pan rallado y luego freírlas en aceite caliente hasta que estén doradas y crujientes por fuera y derretidas por dentro. Se suelen servir como aperitivo o entrante, acompañados habitualmente de una salsa de mostaza o una salsa de ajo.

Información de la receta

• Raciones: 4 personas
• Calorías por ración (kcal): 190
• Tiempo de preparación: 15 minutos
• Tiempo de cocinado: 15 minutos
• Tiempo total: 30 minutos
• Tipo de cocina: suiza
• Categoría: aperitivos

Ingredientes de los malakoffs

• 200 gr de queso gruyère rallado
• 1 diente de ajo picado finamente
• 2 cucharadas de harina
• 1 huevo
• 100 ml de vino blanco
• Pan rallado para rebozar
• Pimienta negra molida
• Aceite vegetal para freír
• Sal

Cómo preparar malakoffs

En un bol grande, mezcla el queso gruyère rallado, el ajo picado, la harina, el huevo y el vino blanco. Asegúrate de que todos los ingredientes estén bien integrados y forma una masa homogénea. Si la masa está demasiado pegajosa, puedes añadir un poco más de harina.

A continuación, sazona la masa con sal y pimienta al gusto. Recuerda que el queso gruyère ya tiene un sabor pronunciado, así que no exageres con la sal.

Con las manos ligeramente humedecidas, forma pequeñas bolitas con la masa y luego aplástalas ligeramente para darles forma de disco. Pasa cada disco por pan rallado, asegurándote de cubrirlo completamente.

Calienta suficiente aceite vegetal en una sartén profunda a fuego medio-alto. Cuando el aceite esté caliente, fríe los malakoffs hasta que estén dorados y crujientes por ambos lados. Retíralos del aceite y colócalos sobre papel absorbente para eliminar el exceso de grasa.

Resumen fácil de la receta

1. Mezclar el queso rallado con el ajo bien picado, la harina, el huevo, el vino blanco, sal y pimienta al gusto, hasta formar una masa homogénea.
2. Formar bolitas pequeñas y aplastarlas ligeramente.
3. Pasarlas por pan rallado y freírlas en abundante aceite caliente hasta dorar.
4. Retirar y dejar escurrir sobre papel absorbente de cocina.