Croquetas de jamón y queso

Las croquetas de jamón y queso son un plato típico de la cocina española. Su origen se remonta al siglo XIX, cuando se empezaron a preparar en la corte del rey Fernando VII. Aunque su receta original se refiere a las croquetas de pollo tradicionales, con el tiempo se popularizó la versión de jamón y queso que vamos a preparar en esta ocasión.

El método de elaboración de estas deliciosas croquetas caseras de jamón y queso consiste en cocinar una bechamel a base de harina, leche y mantequilla, a la que se le añade jamón cocido o jamón serrano y queso cortados en trocitos pequeños. Una vez que la mezcla se enfría durante unas horas en la nevera y adquiere consistencia, se forman las croquetas, se rebozan en huevo batido y pan rallado, y se fríen en aceite caliente hasta que estén doradas y crujientes.

Las croquetas de jamón y queso se sirven habitualmente como parte de un aperitivo o entrante, acompañadas de una salsa de tomate o alioli para mojar, pero también se pueden servir como plato principal, acompañadas de una buena ensalada o de unas patatas fritas para complementar.

Información de la receta

• Raciones: 4 personas
• Calorías por ración (kcal): 390
• Tiempo de preparación: 20 minutos
• Tiempo de refrigeración: 4 horas
• Tiempo de cocinado: 25 minutos
• Tiempo total: 4 horas y 45 minutos
• Tipo de cocina: española
• Categoría: aperitivo

Ingredientes de las croquetas de jamón y queso

• 130 gr de jamón cocido o serrano
• 70 gr de queso gouda
• 500 ml de leche
• 50 gr de harina
• 50 gr de mantequilla
• 1 huevo
• Pan rallado
• Pimienta negra molida
• Aceite para freír
• Sal

Cómo preparar croquetas de jamón y queso

Comenzamos cortando el jamón cocido o serrano y el queso en daditos muy pequeños. Seguidamente, calentamos la mantequilla en un cazo a fuego medio, y cuando se derrita por completo, agregamos la harina, la cual mezclaremos constantemente con la ayuda de unas varillas de cocina durante un minuto.

Vertemos la leche y continuamos removiendo con las varillas hasta que poco a poco, se forme la bechamel. Salpimentamos al gusto, añadimos los taquitos de jamón y queso, y continuamos removiendo durante 5 minutos.

Traspasamos la bechamel a un recipiente amplio y distribuimos uniformemente por toda la base, cubrimos con film transparente tratando de que esté en contacto con la bechamel y no se formen bolsas de aire, dejamos que se atempere a temperatura ambiente, y por último, introducimos la bechamel en el frigorífico durante 4 horas.

Transcurrido ese tiempo, ya podemos dar forma a las croquetas como más nos gusten, yo en este caso he optado por hacerlas con forma de bola. A medida que las vayamos dando forma, las pasamos por huevo batido y seguidamente, por pan rallado. Las iremos reservando en un plato hasta que las tengamos todas empanadas.

Ahora solo nos queda freír las croquetas por tandas en aceite bien caliente hasta que se vuelvan doraditas. A medida que estén listas, las iremos dejando sobre papel de cocina absorbente para retirar así el exceso de aceite. Cuando las tengamos todas, emplatamos y llevamos a la mesa para comerlas calentitas.

Resumen fácil de la receta

1. Cortar el jamón y el queso en daditos muy pequeños.
2. Hacer la bechamel con la mantequilla, harina y leche.
3. Salpimentar al gusto y añadir los taquitos de jamón y queso.
4. Trabajar la bechamel durante 5 minutos con las varillas.
5. Traspasar la bechamel a un recipiente, cubrir con papel film sin que se formen bolsas de aire y dejar atemperar.
6. Introducir la bechamel en la nevera durante 4 horas.
7. Formar las croquetas con la masa, pasarlas por huevo y empanarlas con pan rallado.
8. Freír las croquetas en aceite caliente y por tandas hasta que se doren.
9. Escurrir en papel de cocina antes de servir.