Pan sin horno hecho en sartén
Siguiendo los pasos de esta maravillosa receta, puedes disfrutar en unos pocos minutos de unos panes individuales estupendos para cualquier ocasión. Lo mejor de todo es que no hace falta encender el horno.
¿Quién dice que no se puede hacer un pan rápido sin horno? Pues aquí traigo la receta que lo demuestra, es rápida, muy sencilla y lo mejor de todo es que no tienes que encender el horno, pues el pan se hace estupendamente en una sartén.
Esta es una forma interesante de hacer pan sin horno, pues con ella también nos evitaremos tener que esperar a que leve la masa, ahorrando un tiempo considerable en la elaboración de la receta. Esta manera de hacer pan es perfecta para servir porciones individuales de pan recién hecho a la mesa, pues el tiempo que tardaremos en hacerlo es relativamente corto.
ÍNDICE DE CONTENIDOS
Información de la receta
- Raciones: 8 panecillos
- Calorías por ración (kcal): 166
- Tiempo de preparación: 15 minutos
- Tiempo de cocinado: 10 minutos
- Tiempo total: 25 minutos
- Tipo de cocina: internacional
- Categoría: panes
Ingredientes del pan sin horno
- 300 gr de harina de trigo común
- 225 gr de yogur natural
- 15 gr de azúcar
- 8 gr de levadura química
- ½ cucharadita de sal
Cómo preparar pan en sartén
Colocamos la harina en un bol grande junto con el azúcar, la levadura química y la sal. Mezclamos un poco y añadimos el yogur natural. Continuamos mezclando con una paleta de cocina hasta que todos los ingredientes queden perfectamente integrados.
Cuando la mezcla se vuelva complicada de trabajar, mezclamos con las propias manos hasta formar una masa homogénea. La masa tiene que quedar un tanto pegajosa, así que hay que evitar añadir más harina.
Espolvoreamos un poquito de harina sobre la superficie de trabajo y volcamos la masa sobre ella. Aplastamos la masa dándole una forma circular y extendiéndola hasta que nos quede de un dedo de grosor aproximadamente.
Dividimos la masa en 8 porciones mas o menos iguales, aunque si quieres que los panecillos sean un poco más grandes, la puedes dividir en 6 partes.
Damos forma de bola a cada porción de masa y seguidamente, sobre una superficie enharinada, aplastamos cada bola con el rodillo formando discos redondos de aproximadamente 1 cm de grosor.
Calentamos una sartén antiadherente a fuego medio y colocamos los panecillos por tandas. Cocinamos durante un par de minutos por cada lado o hasta que estén doraditos por ambos lados.
Retiramos a medida que estén listos, y los iremos dejando envueltos en un paño limpio de cocina para que mantengan el calor.
Cuando los tengamos todos, solo nos quedará rellenarlos de lo que más nos guste, puede ser tanto dulce como salado, o incluso están muy ricos si decides comerlos solos. Buen provecho!!
Cómo utilizar este tipo de pan
Evidentemente con este pan vamos a acompañar nuestros platos de carnes y pescados, sobre todo si llevan salsita para mojar, pero también lo podemos utilizar de otras maneras.
Una de ellas y que gusta a los más pequeños de la casa, es para la merienda. Corta el pan por la mitad y rellénalo con unas lonchas de jamón cocido y otras de queso, te quedará el bocadillo perfecto para hora de merendar.
Otra forma que me encanta personalmente, es abrir el pan por la mitad, tostarlo un poco en la tostadora y por último, untarlo con un poco de mantequilla y mermelada. Una opción estupenda para servir en un desayuno junto con el café con leche o el ColaCaco de los niños.
Proceso de congelación del pan
Prácticamente se puede congelar todo tipo de pan, así si preparamos una buena remesa, siempre tenemos la posibilidad de conservar el pan sobrante y utilizarlo para otra ocasión.
Para congelar el pan es necesario que ya esté hecho, es decir, que sigamos todos los pasos hasta finalizar la receta.
Una vez tengamos hecho el pan y fuera ya del horno, dejaremos que se enfríe sobre una rejilla a temperatura ambiente durante unos cuantos minutos, hasta que veamos que ya no está caliente.
Para conservar el pan en el congelador, hay que colocarlo sobre una bandeja y taparlo con papel film. Si tienes mucha cantidad de pan, otra opción es sacar uno de los cajones del congelador, forrarlo con una bolsa de plástico limpia, colocar todos los panes amontonándolos para ahorrar espacio y por último, taparlos con otra bolsa de plástico de forma que queden totalmente cubiertos.
Por último, para descongelar el pan solo hay que sacar las porciones que necesitemos y dejarlas a temperatura ambiente hasta que estén tiernas. Para agilizar este procedimiento, también podemos utilizar el microondas con la función de descongelación.
Otras recetas de pan que te recomiendo
Estos panecillos que hemos preparado hoy son perfectos también para rellenar y servirlos como pequeños bocadillos, pero para este fin, te recomiendo los bollitos de pan casero, pues quedan mucho más tiernos y esponjosos.
Si lo que buscas es un pan para tus hamburguesas, lo más recomendable es el pan rústico especial para hamburguesas, unos bollos redondos con una miga suave y corteza consistente que aguanta todo lo que le pongas, evitando así que termine desmoronándose.
Y por último tenemos el pan árabe popularmente conocido como pan de pita, el cual puedes rellenar con vegetales, carne de pollo y acompañarlo con la salsa que más te guste. Todo un espectáculo para nuestro paladar!!