El zarangollo es un revuelto de calabacín, cebolla y huevo que se sirve como tapa o aperitivo en los bares de la región de Murcia. Es también muy habitual complementar con zarangollo otros platos a modo de guarnición, sobre todo los de pescado.
Su preparación es muy sencilla y lo único que requiere es de algo de tiempo en la cocina, pues el calabacín y la cebolla se tienen que pochar a fuego lento. Cabe destacar que aunque se trate de una receta con pocos ingredientes, el resultado es delicioso tanto si lo servimos a la mesa en caliente como en frío.
Receta de zarangollo
Ingredientes para hacer zarangollo tradicional
Con estas cantidades tendremos para 4 personas:
- 2 calabacines grandes
- 1 cebolla o 2 cebolletas
- 3 huevos
- Aceite de oliva
- Sal
Preparación del zarangollo de Murcia
- Lo primero que tenemos que hacer es preparar los calabacines, los cuales se pueden pelar o no, eso ya es cuestión de gustos. Cortamos los calabacines a cubos pequeños y reservamos.
- Seguidamente pelamos y cortamos finamente la cebolla.
- Calentamos un buen chorro de aceite de oliva en una sartén amplia a fuego medio y cuando coja temperatura, añadimos la cebolla cortadita.
- Añadimos una pizca de sal y pochamos durante un par de minutos.
- Incorporamos el calabacín troceado y cocinamos a fuego lento durante 20-25 minutos, removiendo de vez en cuando y hasta que el calabacín quede tierno.
- Escurrimos el contenido de la sartén volcándolo en un escurridor, así nos deshacemos de todo el líquido que haya podido soltar el calabacín.
- Devolvemos todo a la sartén y añadimos los huevos previamente batidos.
- Cocinamos todo a fuego medio sin dejar de remover, creando un revuelto y hasta que el huevo quede totalmente cuajado.
- Rectificamos el punto de sal y ya tenemos listo nuestro zarangollo murciano. Buen provecho!!
Comentarios y sugerencias
Es también muy habitual encontrar que el zarangollo te lo sirven con patata, pero de esta manera ya no se trata de la receta tradicional y por eso he decidido no incluirla.
Si quieres servir el zarangollo murciano para un aperitivo, solo tienes que preparar unas llescas de pan, untarlas con el zarangollo y listo, tienes unos estupendos montaditos que gustarán a todos los comensales.
Lo que sobra (si es que sobra), se mete en un recipiente hermético y se guarda en el frigorífico. Al día siguiente está mucho más rico!!