Tarta de queso vasca, receta tradicional
Popularmente conocida como tarta de queso de La Viña, esta tarta se caracteriza por su aspecto tostado en el exterior y su interior tierno y cremoso. Una receta tradicional de la cocina vasca que ahora puedes disfrutar en casa con toda la familia.
Este pastel de queso vasco también conocido tradicionalmente como tarta de queso de La Viña concretamente en Donostia (San Sebastián, España), tiene una gran similitud con la famosa tarta de queso americana, aunque eso sí, con algunas diferencias notorias.
Cuenta con un interior muy cremoso, mientras que su exterior tiene la parte superior «quemada», ya que su horneado se hace a una temperatura muy alta para lograr caramelizar una capa de azúcar que dará lugar a ese aspecto tan característico de este delicioso postre.
ÍNDICE DE CONTENIDOS
Información de la receta
- Raciones: 6-8 personas
- Calorías por ración (kcal): 345
- Tiempo de preparación: 15 minutos
- Tiempo de cocinado: 45 minutos
- Tiempo de refrigeración: 1 hora
- Tiempo total: 2 horas
- Tipo de cocina: española
- Categoría: postres
Ingredientes necesarios
- 900 gr de queso crema tipo Filadelfia
- 5 huevos
- 2 yemas de huevo
- 280 gr de azúcar
- 230 gr de nata para montar (mínimo 35% materia grasa)
- 2 cucharadas de harina de trigo
- 2 cucharaditas de extracto de vainilla
- Ralladura de un limón
- 1 cucharadita de sal
Cómo preparar tarta de queso vasca
Forramos con papel de hornear un molde desmontable de unos 22-25 cm de diámetro, de modo que todo el interior quede bien cubierto y el papel sobresalga unos 5 cm por todo el perímetro.
En un bol mezclamos con una batidora amasadora el queso crema y todo el azúcar menos dos cucharadas que reservaremos para el final. La mezcla tiene que quedar suave y sin grumos, por lo que es importante trabajarla durante 3-4 minutos.
Ahora incorporamos los huevos uno a uno y mezclando al mismo tiempo. Hacemos los mismo con las yemas de huevo hasta conseguir una mezcla suave y homogénea.
Agregamos la nata líquida o crema de leche, la harina tamizada, la sal, la esencia de vainilla y la ralladura de limón (sólo la parte amarilla de la piel).
Continuamos mezclando durante unos minutos hasta que todo vuelva a estar bien integrado y vertemos esta mezcla en el molde que hemos preparado. Metemos el molde en la nevera y refrigeramos durante 1 hora.
Unos minutos antes de que transcurra ese tiempo, precalentamos nuestro horno a a una temperatura de 230ºC con la rejilla colocada en el centro.
Sacamos el molde de la nevera y espolvoreamos las dos cucharadas de azúcar que habíamos reservado anteriormente, intentando cubrir toda la superficie.
Con el horno a la temperatura indicada, introducimos el pastel de queso dejándolo sobre la rejilla y horneamos durante 25-30 minutos hasta que la superficie coja un color marrón claro.
Subimos la temperatura de nuestro horno a 250ºC y continuamos horneando durante 20 minutos más, o hasta que la superficie de la tarta tenga un color marrón oscuro como si estuviera «quemada». Si notamos que se está dorando demasiado rápido, tendremos que cubrir la superficie con papel de aluminio y así daremos tiempo a que se haga por dentro.
Sacamos el molde del horno y lo dejamos sobre una rejilla hasta que se enfríe por completo a temperatura ambiente (aproximadamente 4 horas).
Seguidamente desmoldamos el pastel y retiramos el papel de los lados. Con un cuchillo afilado lo cortamos en trozos o raciones individuales y ya podemos disfrutar de este maravilloso postre.
Comentarios y sugerencias
Es importante refrigerar el pastel vasco antes de hornear, así conseguiremos que su interior quede muy cremoso y al mismo tiempo, evitaremos que se cocine mas de la cuenta.
Al cubrir la superficie con una capa fina de azúcar logramos ese color tan dorado que tanto caracteriza a esta tarta de queso vasca.
Lo que nos sobre de este fantástico postre, se puede envolver en papel film y guardar en la nevera hasta un máximo de 3 días. Al momento de servir, basta con dejarlo que alcance la temperatura ambiente por sí solo antes de servirlo a la mesa.
Resumen fácil de la receta
- Forrar un molde desmontable con papel de horno.
- Batir el queso crema con el azúcar hasta obtener una mezcla suave.
- Añadir los huevos uno a uno, luego las yemas.
- Incorporar la nata, harina, sal, esencia de vainilla y ralladura de limón.
- Verter la mezcla en el molde y refrigerar durante 1 hora.
- Hornear a 230°C durante 25-30 minutos.
- Espolvorear azúcar y hornear a 250°C durante 20 minutos o hasta que esté dorada.
- Dejar enfriar completamente antes de desmoldar y servir.
La tarta de queso vasca está rica, pero prefiero las tartas de queso más tradicionales, con base de galletas.
Entonces tienes que probar la tarta de queso sin horno, seguro que te va a encantar.
La hice siguiendo esta receta y quedó espectacular. ¡Todo el mundo me pidió la receta!
Nunca había probado nada igual. La textura es increíblemente suave y el sabor es adictivo.