En esta ocasión voy a mostrarte una receta de albóndigas con guisantes, un plato tradicional que suele gustar tanto a grandes como a pequeños, siendo también una buena opción para llevar al trabajo en un táper.
Las albóndigas quedan muy jugosas por dentro y la salsa está espectacular, lo mejor de todo es que su elaboración no tiene ninguna complicación y además, para preparar estas albóndigas con guisantes y salsa de tomate solo se necesitan ingredientes fáciles de encontrar.
Receta de albóndigas con guisantes
Ingredientes para hacer albóndigas con guisantes
Con estas cantidades tendremos para 4 personas:
- 500 gr de carne picada de ternera
- 1 bote de tomate triturado
- 1 zanahoria mediana
- 1 huevo
- 1 cebolla mediana
- 180 gr de guisantes congelados
- La miga de un trozo de pan
- ½ vaso de leche
- 200 ml de vino blanco
- Harina
- 1 cucharada de perejil picado
- Pimienta molida
- Aceite de oliva
- Sal
Cómo preparar las albóndigas
- Mojamos la miga de pan con la leche hasta que se empape bien, yo he utilizado dos rebanadas de pan de molde sin corteza.
- Luego escurrimos bien oprimiendo el pan con las manos hasta que la leche se desprenda lo máximo posible.
- En un bol vamos a mezclar la carne picada, el huevo, el perejil y la miga de pan bien escurrida.
- Salpimentamos y amasamos enérgicamente con un tenedor hasta conseguir una mezcla homogénea.
- Con las manos formamos las albóndigas y vamos pasándolas por la harina, tratando de que no queden con demasiada harina.
- Cuando ya tengamos formadas todas las albóndigas, calentamos 4-5 cucharadas de aceite en una cazuela de fondo ancho y las freiremos durante 3-4 minutos, dándoles la vuelta para que se hagan por todos los lados.
- Sacamos las albóndigas de la cazuela a medida que vayan quedando doraditas, reservándolas sobre papel absorbente para tratar de quitarles el máximo de aceite posible.
Cómo hacer albóndigas con guisantes y salsa de tomate
- En la misma cazuela y con el mismo aceite, rehogamos la zanahoria previamente pelada y cortada en rodajas finas junto con la cebolla bien picadita.
- Cuando comience a coger color, añadiremos el tomate triturado, una pizca de sal y cocinamos a fuego medio-bajo durante 15 minutos removiendo de vez en cuando.
- Incorporamos las albóndigas que teníamos reservadas, el vino blanco y los guisantes.
- Continuamos cocinando durante 20 minutos más, sin olvidarnos de remover de cuando en cuando para que no se nos queme la salsa.
- Es importante que vayamos controlando las albóndigas y si nos percatamos de que se quedan sin líquido (a mi no me ha pasado), tendremos que añadirlas un poco de agua y rectificar el punto de sal si es necesario.
- Transcurridos los 20 minutos, retiramos la cazuela del fuego y emplatamos para servirlas a la mesa inmediatamente antes de que se enfríen. Buen provecho!!
Otras recetas de albóndigas que te recomiendo
Las albóndigas a la jardinera son muy parecidas a las que hemos preparado hoy, pero algo más completas, ya que entre sus ingredientes encontramos también la patata.
Otra opción que te recomiendo son las albóndigas de pollo en salsa de cebolla, un plato súper delicioso al que hay que acompañar con un buen pedazo de pan, pues estas albóndigas están de «toma pan y moja».
Y si quieres probar recetas nuevas y bien sabrosas, te puedo decir que las albóndigas con judías y jamón están tremendas. Son muy fáciles de preparar y seguro que te van a gustar.