Flan de leche condensada
En esta ocasión quiero mostrarte cómo hacer este delicioso flan de leche condensada. Un postre dulce y cremoso muy sencillo de preparar y que además, es perfecto para culminar cualquier comida de la semana.
El flan de leche condensada es un flan muy fácil de preparar y sencillo, su dulzor proviene de la misma leche condensada, no se le añade ningún extra de azúcar a la mezcla. Y como todos los flanes parten de unos ingredientes básicos como son los huevos, la leche y en este caso la leche condensada.
Este tipo de flanes son cremosos como el de queso y su textura es mucho más consistente. Hoy lo vamos a elaborar mediante la técnica llamada «al baño maría», con la que conseguiremos que se cocine más lentamente y de manera más uniforme.
Te recomiendo que lo pruebes porque realmente es un flan casero que está buenísimo, así que sin más dilación, vamos a comenzar con la receta!.
ÍNDICE DE CONTENIDOS
Información de la receta
- Raciones: 6 personas
- Calorías por ración (kcal): 300
- Tiempo de preparación: 15 minutos
- Tiempo de cocinado: 1 hora
- Tiempo total: 1 hora y 15 minutos
- Tipo de cocina: internacional
- Categoría: postre
Ingredientes del flan de leche condensada
- 1 bote pequeño de leche condensada de 370 gr
- 500 ml de leche entera
- 3 huevos
- 2 yemas de huevo
- 1 cucharada de extracto de vainilla
Para el caramelo:
- 2 cucharadas de agua
- 4 cucharadas colmadas de azúcar blanco
Si lo prefieres, puedes hacer la leche condensada en casa, la receta la tienes aquí; Cómo hacer leche condensada casera.
Cómo preparar flan de leche condensada
Comenzamos preparando el caramelo, para ello, echamos el azúcar y el agua, lo calentamos a fuego medio y cuando comience a burbujear, veremos que comienza a dorarse el azúcar.
Sin remover, esperamos unos instantes a que el caramelo adquiera un tono más oscuro, pero cuidado, no hay que pasarse porque corremos el riesgo de que se llegue a quemar y quedaría inservible y esto pasa rápidamente si no estamos al tanto.
Cuando el caramelo esté ya en su punto, retiramos del fuego y vertemos en un molde tipo corona (puedes comprarlo aquí). Esta operación hay que hacerla con el máximo cuidado, pues las quemaduras de caramelo líquido son las más peligrosas que existen en cocina. Distribuimos el caramelo por toda la base del molde y reservamos.
Precalentamos el horno a 190º C, con calor arriba y abajo y sin ventilador. Ahora vamos a preparar la mezcla para el flan, para ello ponemos en un bol grande los huevos, las yemas, la leche condensada y el extracto de vainilla, batimos con las varillas eléctricas o de mano hasta conseguir una mezcla homogénea. Vertemos la mezcla en el molde por encima del caramelo y lo cubrimos con papel albal.
Colocamos el molde sobre una bandeja de horno profunda o un recipiente para horno, vertemos algo más de dos dedos de agua en la bandeja y lo metemos en el horno, a una altura de dos niveles contando desde abajo.
Cocemos el flan en el horno durante 1 hora. Transcurridos los primeros 30 minutos, retiramos el papel albal y después de otros 20 minutos más, tenemos que comprobar si ha cuajado, pinchándolo con un palillo. Si no es así, lo dejamos hasta que lo esté, unos 10 minutos más, aproximadamente.
Pasado el tiempo y cuando el flan haya cuajado, lo sacamos del horno y dejamos el flan se enfríe sin desmoldarlo. Una vez frío, lo metemos en la nevera mínimo durante unas 4 horas para que coja consistencia y luego esté mucho más rico.
Transcurrido ese tiempo, lo desmoldamos con cuidado y el caramelo caerá bañando todo el flan. Ahora es el momento de servir y probar este delicioso flan de leche condensada. Buen provecho!!
Comentarios y sugerencias
Este tipo de flan al igual que otros, lo puedes hacer con la leche que suelas consumir en tu casa, entera, semidesnatada… Del mismo modo si prefieres hacer flanes individuales, reparte la mezcla en moldes pequeños y sigue el mismo método con el que hemos hecho esta receta.
Los flanes cremosos son los que están de más actualidad en la gastronomía, de ahí que se prescinda tanto de las claras y se usen más las yemas, para darles más cuerpo y consistencia.