Berlinesas

Las berlinesas son conocidas también por otros nombres como berlinas, bolas de fraile o suspiros de monja, y se trata de un dulce típico de la gastronomía alemana, aunque este tipo de bollo dulce ya lo podemos encontrar en las pastelerías de muchos otros países, pues gracias a su popularidad y la facilidad de esta receta, se ha ido extendido por gran parte de Europa y Latinoamérica.

Según cuenta la leyenda, en el año 1756 un panadero berlinés fue contratado para estar al servicio del Rey Federico el Grande, y en agradecimiento preparó unos bollos fritos para su regimiento, los cuales eran redondos, dulces y se asemejaban a unas bolas de cañón.

En la actualidad, esos mismos bollos se suelen rellenar con crema pastelera, nata montada o cualquier tipo de mermelada, dando lugar a una opción estupenda para acompañar nuestro café con leche por las mañanas.

Información de la receta

• Cantidad: 8 unidades
• Calorías por ración (kcal): 223
• Tiempo de preparación: 25 minutos
• Tiempo de reposo: 1 hora y 20 minutos
• Tiempo de cocinado: 15 minutos
• Tiempo total: 2 horas
• Tipo de cocina: Alemana
• Categoría: Bollos

Ingredientes de las berlinesas

• 500 gr de harina de trigo
• 200 ml de leche tibia
• 75 gr de mantequilla a temperatura ambiente
• 60 gr de azúcar
• 2 huevos
• 25 gr de levadura fresca
• Azúcar glass
• ¼ de cucharadita de sal
• 1 litro de aceite para freír

Cómo preparar berlinesas

Comenzaremos por mezclar el azúcar con la leche tibia en un recipiente. Colocamos la harina en un bol, hacemos un hueco en el centro y vertemos la leche. Seguidamente añadimos la levadura fresca previamente desmenuzada. Sin mezclar, cubrimos el bol con un paño limpio y dejamos reposar durante 10 minutos para que se active la levadura.

Transcurrido ese tiempo, agregamos la mantequilla atemperada, los huevos y la sal. Ahora si, mezclamos todo bien con una paleta de cocina hasta que se forme una masa. Espolvoreamos un poco de harina sobre la superficie de trabajo y volcamos allí la masa.

Amasamos con las manos durante 15 minutos hasta que nos quede elástica y manejable. Formamos una bola y la colocamos en un recipiente ligeramente engrasado con aceite. Cubrimos con un paño de cocina y dejamos que repose durante una hora en un lugar cálido hasta que doble su tamaño.

Pasado ese tiempo, volvemos a colocar la masa en el lugar de trabajo y amasamos durante un par de minutos. Cortamos la masa en porciones de unos 70-80 gramos cada una y formamos una bolita con cada una de ellas.

Iremos colocando las bolitas de masa en una bandeja, a la cual habremos puesto previamente un papel de hornear. Aplastamos ligeramente cada una de ellas con la palma de la mano y cubrimos nuevamente con un paño limpio y dejamos reposar durante 20 minutos.

Ponemos el aceite a calentar a fuego medio en una cazuela hasta que llegue a 130º C. Introducimos por tandas las berlinesas con la ayuda de una espumadera y colocamos una tapa a la cazuela. Freímos las berlinesas durante dos minutos y les daremos la vuelta para que se hagan por el otro lado durante dos minutos mas.

Cuando estén doraditas, las sacamos con la espumadera y las dejaremos sobre papel absorbente de cocina para retirar el exceso de aceite. Continuamos friendo las berlinesas hasta que estén todas hechas.

Ahora es cuando las podemos rellenar con alguna crema o mermelada con la ayuda de la manga pastelera, aunque también las podemos servir tal cual, solo falta espolvorear azúcar glass por encima y ya estarán listas para degustar. Buen provecho!!

Trucos para hacer unas berlinesas perfectas

Es importante respetar el tiempo de amasado, pues es uno de los factores que ayudarán a que las berlinesas queden muy suaves y esponjosas.

Si no tienes un termómetro de cocina para medir la temperatura del aceite, introduce un palillo mondadientes y si comienza a burbujear el aceite alrededor, eso significa que ya puedes freír tus berlinesas.