Patatas Hasselback

Las patatas Hasselback o a la Hasselbacken, son unas patatas enteras asadas al horno que tienen la peculiaridad de que están cortadas hasta la mitad en rodajas finas. Son perfectas para servirlas acompañadas de las salsas que más nos gusten, siendo para mí la salsa alioli y la salsa gaucha las más recomendables para servir con este tipo de platos.

Estas patatas tienen su origen en Suecia, concretamente en su capital Estocolmo, donde en el restaurante Hasselbacken en Djurgården por el año 1953, a un chef llamado Leif Elisson se le ocurrió cortar las patatas de esta forma tan peculiar antes de meterlas en el horno.

Desde entonces y hasta el día de hoy, las patatas Hasselback se han hecho tan populares, que ahora es habitual encontrarlas en forma de aperitivo o como guarnición en prácticamente todos los restaurantes del país.

Hoy quiero mostrarte la receta original para hacer estas ricas patatas, una elaboración sencilla pero con un resultado sabroso y desde luego muy vistoso y original.

Información de la receta

• Raciones: 4 personas
• Calorías por ración (kcal): 320
• Tiempo de preparación: 10 minutos
• Tiempo de cocinado: 45 minutos
• Tiempo total: 55 minutos
• Tipo de cocina: sueca
• Categoría: guarniciones

Ingredientes de las patatas Hasselback

• 5 patatas medianas tirando a grandes
• 3 dientes de ajo
• Mantequilla
• Pimienta negra molida
• Aceite de oliva
• Sal

Cómo preparar patatas Hasselback

Lo primero que tenemos que hacer es lavar bien las patatas porque vamos a asarlas con la piel. Hay que elegirlas bien, que no tengan marcas y que sean de forma alargada. Hay que tener en cuenta que estas patatas llamarán la atención de los comensales y tienen que estar bien bonitas.

Una vez lavadas, las secamos un poco y las cortamos en rodajas de algo menos de 1 cm de grosor, pero sin llegar a cortarlas del todo.

Después pelamos los dientes de ajo y los cortamos en finas láminas. Insertamos los dientes de ajo laminados entre las rodajas de las patatas. O si lo prefieres, se pueden machacar los ajos en un mortero y con una brocha de cocina, pincelar entre las rodajas de la patata.

A medida que las vayamos teniendo listas, las iremos colocando sobre una fuente apta para el horno y precalentamos nuestro horno a una temperatura de 200º C. Mientras tanto, vertemos un poco de aceite de oliva por encima de las patatas, intentando que entre por las aberturas.

Salpimentamos al gusto y untamos un poco de mantequilla por encima de las patatas. Cuando el horno alcance la temperatura indicada, las introducimos en el horno y asamos durante 45 minutos aproximadamente. Antes de sacarlas comprobamos si están bien hechas.

Como puedes comprobar, hacer unas patatas Hasselback es muy fácil y lo mejor de todo, es que siempre quedan bien tiernas por dentro y crujientes por fuera. Ahora solo queda servirlas solas o acompañadas de tu salsa preferida. Buen provecho!!

Vídeo de la receta

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Qué sería de nuestra gastronomía sin las patatas ¿verdad?. En mi casa son prácticamente imprescindibles, pues no me puedo imaginar los platos de carnes y pescados sin su correspondiente guarnición de patatas asadas, fritas, hervidas o al vapor.

Y con la intención de ofrecerte algunas ideas que de verdad son resultonas, a continuación te voy a mostrar unas cuantas opciones para preparar unas patatas de guarnición.